Venía, hecha de mar y sus aromas,
con algas en sus pies y en carne viva,
con la gracia ondulante de la espiga
movida por un vuelo de palomas.
El cielo tiene envidia, cuando asomas
como nota que suena fugitiva,
en esta playa de otoño, ahora esquiva,
sin la luz y la
gracia, con que tomas
ese sol necesario en tu existencia.
Esa brisa, fundida con el viento,
se aureola de luz con tu presencia.
Recobra su importancia, lo vivido,
renace a flor de piel el sentimiento,
con un temblor de amor, estremecido.
Que bonito Juan, no me sorprende que el sol tenga envidia, leyendo tu poema la tengo de no poder decir y pensar esas cosas tan bellas.
ResponderEliminarUn abrazo
Hermoso poema el tuyo. Siento la brisa marina y ya sueño con todos los sentidos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un soneto que es una belleza. una brisa de mar que hoy en tu tierra debe tener aroma a primavera.
ResponderEliminarmariarosa
Madre míaqué soneto tan bello, airoso y ondulante.
ResponderEliminarUn placer inmenso leerte, querido Juan. Un fuerte abrazo
Un soneto apasionado, cadencioso, armonioso y bien estructurado, Juan...Todo un homenaje a la belleza de la mujer, que llega con el sol y la luz del otoño, como un milagro para encender el amor...Mágico, realmente mágico.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu constante buen hacer, infinito como el mar y la tierra manchega.
Y es tan bonito, que me lo guardo con tu permiso.
ResponderEliminarAbrazo marino.
Gracias Juan por esta preciosidad de poema.
ResponderEliminarLa mar, en la orilla el encaje de la espuma, su olor, huele a vida, inspira, su color la brisa, todo un deleite que un alma tan sensible como la tuya la convierte en la belleza de la poesía...
Un abrazo.
No diré nada, no vaya a ser que rompa alguna cosa. Solo que... precioso.
ResponderEliminarTe salen tan redondos los sonetos que llega a parecer sencillo escribirlos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Eres el Rey del Soneto y de todo lo que toques, ya sean pinceles, teclas o palabras.
ResponderEliminarMe ha emocionado, ¡qué belleza! y ¡qué sensibilidad!
Te dejo un besazo, que me voy a leerlo otra vez otra y quizás otra.
Un conmovedor soneto, Juan. Es verdaderamente hermoso. Abrazos
ResponderEliminarExcelente y vívido poema amigo Juan.
ResponderEliminarMe encantan estas palabras, su trasfondo:
"en esta playa de otoño, ahora esquiva,"
"Recobra su importancia, lo vivido,"
Abrazos.
Tierno sentimiento amoroso a la vera del mar, Juan, un abrazo!
ResponderEliminarDespués de leer tu poema, me he ido a la cocina a remover mi comida, llevaba en mente tu poema y apagué el fuego para volver y escribirte:
ResponderEliminarHay poemas que fluyen alados del corazón, son como epístolas nostálgicas que llevan nombre y dirección, seguro que la destinataria las espera ansiosa aún en esa otra dimensión.
El amor es eterno.
Me han emocionado tus letras.
Cariños.
kasioles
Me gustan tus haikus, Juan. Pero tus sonetos no tienen precio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya estoy de vuelta. Y veo que sigues en plena forma: belleza por los cuatro costados :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Una preciosidad.
ResponderEliminarGracias
un beso