jueves, 8 de febrero de 2018

LA POESÍA Y EL FLAMENCO



Enrique Morente y Pepe el Habichuela. Foto de Internet retocada con Photoshop, por el autor.



Aceptando la invitación de la amiga Ester, subo este escrito de hace  años, con el deseo de que la afición por eso tan nuestro como el flamenco, siga prendiendo en la sensibilidad de los más jóvenes.


Decía el poeta José Bergamín, algo que yo comparto plenamente y que me gustaría que también fuese compartido por vosotros:


Cuando escucho una guitarra
Un cante por “soleá”
Oigo en mi alma un silencio
Que es música de verdad
Música tan de verdad
Que las estrellas se callan
Para poderla escuchar.


En el cante flamenco, sus letras son un compendio de saberes populares, que no están adscritos a ninguna corriente poética, ni sabe de academias, parnasos ni diccionarios.

Decía el gran poeta y flamencólogo Félix Grande, recientemente fallecido, que el tema flamenco es el infortunio de la vida, pero no es eso solo.

El flamenco canta a la pena, a la muerte, al amor y su contrario. Canta las ausencias, a la mina, al campo, a la prisión, a la política. En definitiva canta a la vida y a todo lo que la hace posible, aunque duela.

No existe un listado de antologías, ni vetusto sillones dan aposento a consagrados autores, pero toda la sabiduría del pueblo, se pueden resumir en una noche flamenca alegrada con la inestimable compañía de un buen vino y buenos amigos.
Es verdad, como algunos dicen, que no se hace justicia con la poesía flamenca. Pero es igual, en los anaqueles del alma de los buenos aficionados se van guardando cantes que con sus sencillos pero definitivos versos, hacen que los entresijos sensibles del organismo los aprecien como valen y los conserven como reliquias del saber.

Para los que queráis iniciaros, os dejo un ramillete de cantes que son, al menos eso creo, verdaderos dijes literarios.


Que son penas me preguntas
No te lo puedo explicar
Las penas son del que sufre
Y no son de nadie más.
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Dijo a la lengua el suspiro
Échate a buscar palabras
Que digan lo que yo digo
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Será que no se contar
Que cuando cuento mis penas
Me salen penas de más
Será que me sobran penas.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Que yo cantar no quería
Que nadie sabe la pena
Que me cuesta esta alegría
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Las glorias de este mundo
Son transitorias
Pues duran mientras pasan
Por la memoria.
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Hay gente que va diciendo
Que es dueño de la verdad
La verdad no tiene dueño
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Que nadie se llame a engaño
Todo el que vive por dentro
Por dentro se está matando
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Desgraciao aquel que come
El pan en manita ajena
Siempre mirando a la cara
Si la ponen mala o buena.
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Mira si soy desgraciao
Que estoy deseando morirme
Pa vivir bajo techao
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El tiempo se come al tiempo
Lo bueno y lo malo alternan
Vivamos todos los días
Y lo que viniera venga.
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Y aquí acaba mi pequeña recolección. Esto, más que una cosecha es una rebusca. Ahora os toca a vosotros. Escuchar y sentir después de haber leído.

Abrir vuestros poros al sentimiento y dejad que entre dentro de vosotros la tremenda y honda belleza de estos cantes que os harán estar más cerca de los hombres y sus vivencias.

Os dejo este vídeo del gran maestro Fosforito, con esta Alegrías de Cádiz,  muy bien acompañado por el gran guitarrista cordobés Manuel Silveria. Espero que esto se un acicate para no iniciados.








11 comentarios:

  1. Bonita y completa entrada JUAN, y me ha gustado porque el flamenco es mí casa siempre se escuchaba mucho; y vaya a los pedazos de artistas que nos has nombrado. Ya hacía mucho tiempo que no escuchaba al maestro Fosforito en esta bonita canción. Esa foto retocada te ha quedado de maravilla.

    Abrazo JUAN.

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  2. Que cierto es que no se hace justicia con la poesía flamenca aunque siempre alcanza el corazón. Una magnífica entrada.

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  3. Genial esta entrada, pues sí, la poesía flamenca tiene su punto, que no se debería olvidar.
    Me encantó este post.
    Mi felicitación juan.
    Un abrazo.

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  4. Has puesto una bonita foto retocada de dos grandes flamencos que, para más inri, son granainos, quiero creer que el problema del cante flamenco es que muchos lo confunden con la canción española o incluso con las sevillanas; posiblemente, pese a ser Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, desde Andalucía no se ha sabido o querido presentar unos cantes que a diferencia de esas sevillanas y cantes aflamencados hablan, como bien has dicho, de una vida nada fácil del pueblo andaluz y del levante.

    Un abrazo.

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  5. Te aplaudo con las manos pero las mueve la emoción y el corazón , no exagero, que preciosa y completa entrada. El flamenco es arte con mayúsculas pero leído con minúsculas, no hay culpables lo somos todos, pienso que los que nos gusta no lo publicitamos par que no se gaste. Me dijeron un día, el flamenco y el tango son hermanos, puede que sean primos hermanos por parte de padre, porque no hay cante mas antiguo que el flamenco.
    Podrías regalarnos un día a la semana, o un día al mes una entrada sobre este tema, es tan extenso que puede ser muy variado. Podría sumarse Emilio Manuel y alguno mas, los que quieran, vamos a promocionarlo un poquito. Gracias de verdad y abrazos sinceros

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  6. Aquí siempre se ha relacionado el Flamenco con el Franquismo, por eso me llegó tarde la inspiración y la afición. Modesta, pero afición.
    Un abrazo.

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  7. Nos has dejado aquí una colección divina... Llega al alma...

    Muchos besos, Juan.

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  8. ¡Olé por el temazo que nos traes!

    El glorioso cantaor gaditano, Enrique Ortega, fue gran amigo de Silverio Franconetti, motivó su aficionamiento a la escuela sevillana, llegando a cantar los cantes del gran Silverio. Franconetti lo apreciaba como cosa suya. Un día fue a Cádiz a contratar artistas para su café de Sevilla, lo primerito que hizo fue a buscar a su amigo, al que no ya no encontró. Al pasar por Puerta Tierra, mandó parar el coche y a palo seco cantó una sola pero desgarradora seguiriya que dejó a los demás pasmao:

    Por Puerta de Tierra
    no quiero pasá
    Porque m'acuerdo de mi amigo Enrique
    y me echo a yorá...

    Es como dices tú y Manuel Emilio, "chapó"

    Un abrazo a ambos.

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  9. Te felicito por la entrada, además de bien documentada, tiene unas imágenes maravillosas y unas letrillas que son pura literatura y que hoy día en algunos centros de Córdoba se utilizan en la clase de Lengua y Literatura.
    Celebro que te hayas sumado al requerimiento de Ester. Ya estoy deseando leeros.
    Un beso fuerte.

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  10. El post me parece una belleza, no sólo por el reconocimiento que haces a ese cantar que está enhebrado en las mismas raíces de nuestras tradiciones, también por la sensibilidad y maestría con que lo has tratado. No puedo sino quitarme el sombrero, maestro, CHAPEAU!!!

    Otro abrazo de nuestra parte y muy comida y tarde de domingo tengas!!!

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  11. ¡MUY BUENA COMIDA! pone eso ahí, jajajajajaja...

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