Perdonar la intromisión. He leído algunas propuestas de las pedidas para el jueves por TRACY y no he podido
resistirme a montar un trabajo con Photoshop y a escribir algunas ocurrencias
sobre los
ABRAZOS
Hay abrazos fríos como
si los brazos tuvieran querencia de sierpes
heladoras.
Hay abrazos flojos,
como dados por la Venus de Milo, sin apenas pasión ni sentimiento.
Abrazos temblorosos y
refrescantes, con cadencias de olas y espumas.
Abrazos nerviosos y
sin piedad, que no dan tregua y suelen terminar con la explosión retardada de
un racimo de besos.
Abrazos con calentura
de cochura recién hecha, como los de la madre, que terminan en lágrimas cuando
los añoras.
Y los que no se dan,
que terminan por doler, clavándose en el alma cada vez que se recuerdan.
Un abrazo es siempre
una ráfaga de ternura, una plenitud de amor y la consecuencia pactada de una
bella amistad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.