Era primavera y se
habían conocido en el autobús que los llevaba a Benidorm.
A pesar de la fatiga y
otros naturales inconvenientes de la edad, tras conocer sus habitaciones,
salieron juntos al mar para saber de sus caricias de espuma y de sus
inmensidades.
En su felicidad,
sonaron todas las notas del pentagrama que hablaban de alegría. La libertad y
las risas, terminaron por ser sus inefables compañeras.
Un temblor nuevo
acompasaba los latidos, mientras el mar sonreía, mandando enamorada juventud en
cada ola, amontonando brisas en las pieles sudosas de deseos.
Tras la comida,
acordaron bajar a la playa, para conocer el mar a la hora en que las gaviotas
levantan el vuelo buscando el azul del cielo salpicado de estrellas.
Con los pies en la
arena y el corazón en el aire, el amor se hace magia bajo las nubes que se
dejan acariciar por las palmeras.
Los sueños que
desvencijados y polvorientos, anidan en el más lóbrego rincón de la memoria, se
empapan de azules y vuelven a palpitar entre la espuma.
Cogidos de la mano,
pasean por la soledad fresca de la playa, mientras el viejo mar, inteligente
como siempre, sabe que gracias a su magia han aprendido esa lección muchas
veces repetida, de que a pesar de la vida y sus olvidos, siempre un bello
futuro es previsible.
La noche trenza con
mimo los suaves tirabuzones de las olas, mientras las pisadas en la arena
pierden el ritmo, acuciadas de besos y caricias.
En el horizonte, un
barco de luces, les muestra la posible singladura que les lleva a la esperanza.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPreciosa prosa lírica que pone al mar como testigo poético de que el amor no tiene edad.
ResponderEliminarMuy bueno Juan.
Abrazos.
Parece que ya mismo los viajes a Benidorm ya se van a comenzar a realizar. allí estuve días antes del confinamiento total que comenzó en Marzo del 2020, quien nos iba a decir lo que ha ocurrido hasta hoy. Mi segunda dosis me llega este viernes, y a mi esposa dentro de unos días, tenemos ganas de comenzar a viajar a donde sea.
ResponderEliminarUn abrazo.
El amor en la madurez tiene el condimento de los sentimientos profundos, hermoso relato, Juan, un abrazo!
ResponderEliminarHasta Benidorm tiene su encanto :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Desde luego que el amor no tiene edad, una bonita escena con el mar y la noche por testigos.
ResponderEliminarDestino: Benidorm.
Saludos.
Hermosos relato amigo Juan. De bellos relatos está impregnado Benidorm. Después de trabajar mis últimos diez años de singladura laboral en Benidorm y en el mejor hotel de la zona, puede comprobar con mis propios ojos como llegaba el amor en muchos casos entonces para mí como tercera edad. Pude apreciar lo maravillosa que es la vida a cualquier edad amigo mío.
ResponderEliminarUn abrazo y buen resto de semana.
De la prosa poética mejor que he leído últimamente. Preciso canto a la esperanza, sin dejarse vencer por la edad ni sus tropiezos
ResponderEliminarUn gustazo leerte hoy. Repetiría una y mil veces, seguramente porque el mar me alienta y me sostiene. Un abrazo grande
Se lee y se sueña, se piensa en bonito y se celebra ese amor nuevo, y es que el mar, ese viejo mar, es capaz de elevar suspiros y caricias como ningun otro lugar. Un lujo leerte, un descanso a la rutina, gracias por tanto. y un abrazo
ResponderEliminarCon los pies en la arena y el corazón en el aire, el amor se hace magia bajo las nubes que se dejan acariciar por las palmeras.
ResponderEliminarPrecioso!
Qué bonito texto para quien esté dispuesto a entender que el amor no tiene edad. Y para quien no esté dispuesto, también.
ResponderEliminarUn abrazo.
Juan, después de leerte me atrevo a decir que tú eres poesía , lo has demostrado en este texto, lo demuestras cuando no regalas poemas, cuando nos tus pintas imágenes o cuando selecciones música para engarzar tus entradas un don que te pariera tu madre así.
ResponderEliminarLa felicito a ella y te felicito a ti con un fuerte abrazo y mi agradecimiento por las bellas entradas que nos regalas cada día.
Que lindo, para el amor no hay edad, siempre llega, siempre vuelve..... Saludos amigo Juan.
ResponderEliminarExcelente tu texto disfrute mucho leyendo!!
ResponderEliminarJuan, me encantó tu prosa poética, amigo. La vida empieza cada día, no debemos olvidarlo nunca, y nos espera con sus sorpresas y regalos, por encima del tiempo y las edades...Sólo es cuestión de estar atentos y no perder la curiosidad y la esperanza. Mi felicitación por esta preciosidad, que nos impulsa a todos a seguir adelante.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y admirado, Juan.
Una entrada genial Y me fascina la foto en fog nebulosa
ResponderEliminargracias
por compartir tu arte de letras
Boa tarde Juan. Acho que nós cariocas aprendemos a amar o mar e as praias desde crianças. Obrigado pela maravilhosa poesia.
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