Composición del autor.
El
verano terminó. Quedaron atrás los besos con sabor a salitre y espuma, las
caricias moldeando la arcilla morena del deseo y el final presentido de una
apasionada lucha en la que se confundieron los cuerpos, sin saber de vencedor o
vencido.
Se
olvidaron las promesas y aquél amor definitivo fue como una escala sin destino
ni refugio.
Se
acaba septiembre y no me llegan tus cartas prometidas.
Después
de preguntarle cada día desde tu marcha, al fin el cartero me trae una misiva.
No
es tuya. Eduardo, (así se llama el cartero), me invita a salir este sábado. He
aceptado.
A
pesar de que ya va desapareciendo el moreno de la piel, me pondré guapa para
él.
Todo quedo atrás con el verano, solo quedan los recuerdos.
ResponderEliminarUn beso dulce de seda.
Amores de verano "flores de un día son" dice la canción.
ResponderEliminar¡Me encantó !
Re lindo Juan ! y muy tierno.
Un abrazo.
¡Qué pena que el verano se haya ido!, pero hay que pensar en pasarlo lo mejor posible hasta que llegue el próximo verano.
ResponderEliminarY con el verano se termina una etapa que quedará en el recuerdo, pero con el otoño comienza otra que tal vez valga la pena vivir.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo soy de los que piensan que el otoño puede ser y es una estación mucho más atractiva para el amor que el verano.
ResponderEliminarUn abrazo.
MUY BUENOS DÍAS, maese!!! Pues a ver, pienso que todas las estaciones son ideales para el amor; para el amor de verdad, digo, no para los sucedáneos tan propios de los quinceañeros. Es decir, que el verano es ideal, pero también lo es el otoño, ¡y qué decir del invierno y sus mantitas o de la primavera y sus frangancias! O SEA, LOVE ALL YEAR, jajajajajajaja...
ResponderEliminarUn abrazo!!!
Tanto bueno lleve como deja, ahora toca disdrutar del dorado otoño. Cada época tiene su encanto.
ResponderEliminarBesos.
Yo creo que el verano no tiene nada que ver en el asunto si el asunto es profundo y no fruto de sol y playa como les pasó a los chicos de tu historia. Otros se equivocan también o aciertan en otras estaciones. :)
ResponderEliminarUn abrazo, Juan.
Amores de verano: cortos pero muy intensos y con la ventaja de que el tiempo no los altera. Creo que debe haber algún que otro amor de verano que no acaba así, pero deben ser pocos.
ResponderEliminarPrecioso el texto como siempre y la imagen te ha quedado genial.
Besos
Bien por ella porque el calor hace que se nuble la mente por tanto, necesitamos que el frescor del otoño aclare lo que realmente nos interesa ... :))
ResponderEliminarun fuerte abrazo