martes, 30 de marzo de 2021

VIEJA FOTOGRAFÍA


 


 

 

Aburrido, sacó la vieja caja de carne de membrillo donde guardaba las fotografías de su pequeña historia, la de su familia  y  de sus amigos y volvió a repasarlas.

Ya se las sabía casi de memoria, pero aquella tarde reparó en una en la que se encontraba con su amigo Fernando en la plaza del pueblo.

Este llevaba pantalón, chaqueta y zapatos, mientras él vestía de “trapillo” y poco acorde con la pretendida solemnidad que el fotógrafo exigía.

Un pantalón sin cinturón, alpargatas de cáñamo y una camisa blanca un tanto desvaída,  no se sabe si por el sepia de la fotografía o por la propia vejez de la prenda.

La miró detenidamente y tras ponerse las gafas, observó una mancha negra en el bolsillo izquierdo de la camisa. Y recordó.

Con sus pocos y mermados ahorros, se había comprado en un puesto de baratijas en la feria de agosto, una pluma estilográfica, con la que pretendía escribir sus primeros ansiados versos.

Ufano de la adquisición, siempre la llevaba en el escaparate del bolsillo camisero, sin saber que la simpleza del artilugio, sumado al calor agosteño, era suficiente para que el mínimo depósito de tinta, ahíto de sudores, vaciara su contenido en la otrora impoluta camisa.

Recuerda la bronca de su madre, la desaparición de la pluma y el saber que desde entonces, cada poema escrito, debía dejar sobre la blancura de la cuartilla, junto a palabras negras como crepúsculos desencantados, la blanca inocencia de lo vivido y sobre todo, aun con el paso de las años, la juvenil decisión de seguir aspirando a lo imposible.


domingo, 28 de marzo de 2021

DE DOMINGO A DOMINGO... (XXX)


 

MÚSICA TUYA

(Blas de Otero)

¿Es verdad que te gusta verte hundida

en el mar de la música; dejarte

llevar por esas alas, abismarte

en esa luz tan honda y escondida?

 

Si no es así, no ames más; dame tu vida,

que ella es la esencia y el clamor del arte;

herida estás de Dios de parte a parte,

y yo quiero escuchar solo esa herida.

 

Mares, alas, intensas luces libres,

sonarán en mi alma cuando vibres,

ciega de amor, tañida entre mis brazos.

 

Y yo sabré la música ardorosa

de unas alas de Dios, de una luz rosa,

de un mar total con olas como abrazos.






jueves, 25 de marzo de 2021

OTRA PRIMAVERA


 

 

Desdibujada esta primavera,

con su tristeza de jazmines

llorando en las ventanas.

 El crepúsculo

vacía las terrazas

y esconde las sonrisas

como se esconde la luna

entre nubes de silencio.

 

Hubo otra,

cuando mi niñez era como una lagartija

que reptaba entre las piedras,

sorteando puñaladas de luz,

ajena a todas las pisadas,

Aquella,

en que el sol y sus reflejos,

invitaban a las rosas de huir de los jarrones.

Cuando soñando con gaviotas,

me tenía que conformar con los vencejos

que ponían negrura en los tejados.

Aquella,

en la que la luz borraba las tristezas

y la enredadera de los sueños

se aferraba a nuestros muros

ansiosa de auroras, de espumas y de mares.

Aquella,

en la que la palabra derrota,

no existía en el diccionario

y todas las mañanas venían

preñadas de promesas.

 

Añoro y quiero aquella primavera,

sin manteles y con risas,

que esta que amordaza

con su triste sombra de cipreses.


martes, 23 de marzo de 2021

EL ENCUENTRO


 


El día, como todos los últimos, lo había enredado en su maraña de desencantos, prohibiciones y prisas.

La noche, cicatera, no le había prestado la posibilidad de los sueños y hasta el café mañanero, lejos de calentarlo,  le había dejado en el paladar un regusto residual a granza amarga pegado a sus encías.

Al salir de la acogedora cafetería, a pesar del refugio caliente de la lana de su bufanda, sintió en sus mejillas un frío clandestino que los hombres del tiempo no habían descubierto, escondido entre isobaras y anticiclones.

Pensó que, otro día se le presentaba frío y sin futuro y maldijo de su suerte.

Menos mal, que al doblar la esquina, todo cambió en un instante, sin darse cuenta se topó con una joven con un alegre vestido estampado de rosas, que inundaba la mañana con un suave perfume que no era capaz de igualar el aroma juvenil y alegre de su sonrisa.

Se presentaron: él, acostumbrado a no saberse escuchado la mayoría de las veces, dijo con énfasis su nombre y apellidos.

Ella mirándole de frente con sus inmensos ojos azules dijo:

.- Hola, me llamo Primavera.

En aquel momento supo que su suerte había cambiado.


domingo, 21 de marzo de 2021

DE DOMINGO A DOMINGO... (XXlX)


 

PRIMAVERA

(Ernestina de Champourcin)

 

¡Toda la primavera dormía entre tus manos!

Iniciaste en un gesto la fiesta de las rosas

y erguiste, enajenada,

esa flecha de luz que impregna los caminos.

¡Toda la primavera!

Fervores del instante transido de capullos,

gracia tímida y leve del perfume sin rastro,

caricias que despiertan el sexo de las horas.

Brotaron de tus palmas en éxtasis gozoso

los trinos y las brisas. Y tu ademán secreto

despertó en rubores la pubertad del mundo.

¡Todo vino por ti! Porque tus manos lentas

ciñeron brevemente mi carne estremecida,

porque al rozar mi cuerpo

despertaste una flor que trae la primavera.

 


jueves, 18 de marzo de 2021

GOLONDRINAS


 

GOLONDRINAS

 

               Al lado de este mar me gustaría

               en este paso angosto de mi vida

               que la última canción de despedida

               naciera con compases de alegría.

 

               Por ser rayo de luz yo lucharía

               y ofrecerme como contrapartida

               para que aquella música perdida

               resuelva la ecuación de su armonía.

 

               Pero llueven lágrimas de tristeza

               y suenan malas notas en el viento,

               en la oscura mañana enajenada.

 

               El verso va perdiendo su pureza

               y suena a despedida y a lamento.

               ¡ Golondrinas en clara desbandada !

 


martes, 16 de marzo de 2021

UN BANDO... Y UNA BANDA


 


UN BANDO

 

Removiendo cajones, me he encontrado con un librito de bolsillo, mal editado y con pocas pretensiones, que por el precio de 477 pesetas, incluido el IVA, debí  comprar en algún rastrillo o tenderete, dedicado a los Bandos del Alcalde de Madrid, Don Enrique Tierno Galván.

No me resisto a enseñaros uno de ellos, ahora que se acerca la primavera.

Dice así:

 

MADRILEÑOS:

Es viejo decir poético, con varia fortuna repetido, que con la llegada de la primavera, la naturaleza se viste con sus mejores galas, encubriendo la magra y seca desnudez del invierno con brillantes y copiosos adornos. Pero la humana especie que a veces contraría y repele lo que la natura hace, lejos de cubrir, descubre, y lo que tapado había, destapa, en obsequio del más alegre, descuidado y gozoso vivir al que el bonancible tiempo invita.

Nada tendrá el Alcalde que advertir, respecto de lo dicho, si entre los que tal hacen no hubiera algunos y también algunas que caen en desquiciada y peligrosa confusión, pues hacen de esta Villa, lo que esta Villa no es, tomando los ábregos que de la Mancha vienen o los cálidos aires que del africano Sur nos llegan por suaves o marinas brisas y el recio sol de Castilla. Que más quebranta que alivia, por el suave y reparador que en los altos montes luce.

De tan quimérica versión de la verdad nacen extrañas y peligrosas costumbres, pues desprovistos los hombres de jubón y calzas, pavoneándose en liezos o lenzuelos, en extremo contentos de sí, aunque hayan las carnes flacas, desdichadas las proporciones y mal encajado los huesos, como si lo hubieran sido por un torpe algebrista.

Algo semejante, aunque no igual, ocurre con buena copia de nuestras feminiles visitantes que `por esta ciudad vagan y peregrinan y con numerosas vecinas que arrastradas por la antigua y legítima inclinación  al discreteo, más la quimérica confusión que ya dijimos, dan en despojarse, como con particular y escrupulosa atención ha observado el Alcalde de esta Villa, de corpiños, basquiñas, briales y otras prendas, que por respeto no se nombran, faltando poco, en algunos casos, para que tanto mozas como menos mozas en carnes queden.

Ocasiónanse de este modo graves y superfluos daños, pues quienes desde el pescante los coches guían, alejan la atención de su principal menester, arrastrados por el invencible deseo de mirar, con menoscabo de haciendas, peligro para la vida y aumento de la común confusión.

Sucede además que el grande polvo que la ciudad produce, particularmente en el estío, la quemazón del sol, el rebullir de las simientes y otras vegetales materias en la urbana atmósfera, amén de los humores a cuya expulsión la desnudez promueve, ocasiona salpullidos, llagas, postemas, abscesos y  hasta lamparones, males que, según los físicos del Concejo, empodrecen los suaves miembros y gentiles cuerpos de las vecinas de esta Corte.

Conviene, por último, añadir a lo ya dicho que las buenas costumbres piden comedimiento y mesura en cuanto a destaparse toca, pues en esos lugares de común recreación y roce que son las públicas piscinas, como natura huye los triste y aparece lo deleitable, exagéranse los destapamientos sin haber cuenta del decoro que cada uno a sí propio debe y del respeto que la tranquilidad de los demás merece.

También a veces acaece, cuando los estivales calores son mu grandes, que alguno de nuestros visitantes, para alivio, descanso y alegre algazara y regodeo, se metan en cueros vivos en el agua que llena las tazas de las fuentes públicas monumentales. De cundir este ejemplo, faltarían tazas o sobrarían visitantes, con perjuicio notorio para el bueno y equilibrado proceso de la vida en esta Corte. Amén de que con estos medios, según a esta Alcaldía se alcanza, los ardores, lejos de bajar, aumentan, por lo que se conmina a moradores y visitantes a que no practiquen tan dañosos y censurables usos.

Confía, pues el Alcalde, que durante el presente estío, visitantes, andantes en Corte y las vecinas y vecinos de esta Villa, de cualesquiera edad y condición que sean, salvo los ancianos de cansada y molida senectud, tengan el debido cuidado en cuanto a lo que en este Bando se aconseja, sin caer en impropias mojigaterías, exageraciones ni afectación de virtud.

Madrid, 25 de Mayo de 1.984.

 

El que trascribe jamás pensó que el tiempo pasado fue mejor, que sobradas vivencias tiene para decir lo contrario, pero en este caso y comparando, no tengo más remedio que pensar que el aserto o refranillo está pleno de razón.

 

 


domingo, 14 de marzo de 2021

DE DOMINGO A DOMINGO... (XXVlll)


 

TRILOGÍA DEL VINO

                              (Juan Alcaide Sánchez)

I

Soneto directamente

 

Desde el primer milagro hasta aquel Jueves,

¡cuánta doctrina, Amor, regó el viñedo!

Después …,cuánto aforismo, “dedo” a “dedo”!

¡Cuánto lagar desde vasijas breves!

¡Qué cuenta de pasión, con tantos debes!

¡Qué infinito pagar! ¡Qué claro enredo!

¡Cuántas siete palabras sobre el ruedo!

¡Cuánto extraño volcán bajo las nieves!

Crucificado en el sarmiento, ¡oh vino!

con pámpanos triunfales resucitas

cuando en piedras preciosas te maduras.

Tú rompes la luz blanca al desatino.

Por ti se quedan cuerdas las locuras,

Pues sólo tú nos das…lo que nos quitas.

 

II

 

Soneto de la tinaja al bebedor

 

El mosto es feto de mi vientre, y crece.

Nace en los gritos de la espita, y quema.

Por ti, tonel minero, se hace gema,

gema de amor que por amor padece.

Termómetro del dedo, en él se mece

y abre un clavel de gozo por su yema.

Copla de mano a boca. Y más: dilema

de la boca a la sien, donde fenece…

Berro hermano de Aldonza, carne mía,

yo brindo en mi Toboso de alegría

de un bárbaro Velázquez, vaso a vaso.

Vente, buen bebedor, queda conmigo:

reclina tu sed sobre mi ombligo,

depúrate el volar…y enreda el paso…

 

III

 

Soneto del bebedor a la tinaja

 

Oh, amante del empotro! ¡Oh, Prometea

sumida en ese garfio que te anuda!

Bóveda vertical, panza desnuda,

canguro de la copla y de la idea.

Guillotinada y manca Dulcinea

que orina en turbio cuando es cascas suda.

De barro y no de nácar, grande y ruda

caracola sin mar, mas con marea.

Por tu impúdico corcho, el pulso ardiente

de toda mano ansiosa de tu entraña,

pasó más de una vez sus cinco dedos.

Que eres tripa, eres pecho y eres frente

de todo aquel que asfixia su cizaña…

¡Cáliz de sed de los terribles credos!



 

 

 

 

 


jueves, 11 de marzo de 2021

LOS OTROS AMIGOS


 


Después de publicar, (el pasado día cuatro del presente mes), mi poema AMIGOS y a tenor de un comentario de mi buena y admirada amiga Tracy, me gustaría hacer algunas consideraciones.

En mi poema, quería referirme a aquellos amigos que pululan por los recuerdos, cuando en las tardes de soledades, la nostalgia es la única compañera.

Aquellos que completan el paisaje de una vida que tuvo sentido, en aquellos años en los cuales, a veces solo la amistad, nos podía calentar el espíritu y el cuerpo.

Los que encontré de niño y siguieron acompañándome hasta que la vida, me ordenó otros derroteros.

Hasta los cuarenta años les seguí, (nos seguimos), con fidelidad, pero después la rosa de los vientos se volvió loca y tuve que “ganarme el pan” en sitios distantes y diversos y aquel cordón umbilical que nos unía, se fue secando y solo nos dejaba la cicatriz redonda y triste de la ausencia.

El tiempo, ese huracán descontrolado que arrasa a su paso todas las quimeras, nos fue robando los latidos, las vivencias, las emociones y en muchos casos, hasta la vida.

Y ha pasado tanto tiempo desde entonces, que en aquel campo del recuerdo donde las mieses bailaban al viento suave de la meseta, ahora, una tormenta negra y asesina, solo ha dejado la triste cosecha de una espiga.

A ella me refería a mi poema y quería ser la constatación de que a pesar del tiempo transcurrido, sigue moviéndose al son que le marca existencia y sigue diciéndome que él sabe que yo lo acompaño por que los dos nos juntamos en la distancia cuando vienen mal dadas.

 

Pero no quiero que entendáis que abomino de vosotros, mis amigos virtuales.

Dos días después de que llegue la primavera, serán diez años los que estoy con vosotros y no podéis imaginaros lo que significáis para mí.

Me enseñasteis que la vida tiene sentido cuando a pesar de la distancia los latidos se sienten y acompasan.

Cuando la amistad olvida las obligaciones,  vuestros pensamientos y escritos se añoran y  se necesitan para el vivir cotidiano.

Cuando los besos y los abrazos, no son meros gestos de cortesía y si necesarios sentimientos.

Pero dejarme que os cite un cuarteto del poema “Última voz a la amistad”, de mi poeta de cabecera Juan Alcaide Sánchez, que mucho mejor que yo, explica mis sentimientos:

 

          Soy vuestro aunque no quiera, y lo soy.

          No me queda otra sangre que la que os busca en todo.

          Sólo encuentro firmeza si la mano que os doy,

          buscando un punto honrado, se cuelga en vuestro codo.

 

Lo único que siento es que las palabras que sueño, se van escondiendo en los rincones de mi viejo cerebro y cada día es más difícil pergeñar una estrofa.

Dejarme que os pida una cosa y por favor cumplir con vuestra amistad y avisarme: no permitir que me repita, o que lo que escriba, no esté a la altura de vuestra sensibilidad y sapiencia.

No quiero convertirme en el escombro del edificio de una vida que siempre quiso dar la cara a donde el sol nace y el mar acaricia.

 

P/S.- Este escrito estaba pensado para publicarse el pasado día 9, martes, pero por la vacuna se quedó postergado hasta hoy.

Otrosí: pido disculpas a mi buena amiga Neo por el atraco. Espero que me perdone.

 

 

 


martes, 9 de marzo de 2021

¡¡¡ VAMOS A POR LA PRIMERA!!!


 Aunque están suspendidas las de la Madalena ,hoy me he tomado el día de fiesta

Me han puesto la primera dosis de la vacuna y el próximo día 30, me ponen la segunda.

¡¡¡Alguna ventaja deberíamos tener los " puretas"!!!*

*Hala al Diccionario de la Rae, los que estén exentos de canas y arrugas-

Afortunadamente no ha habido ninguna reacción y todo sigue igual, aunque con la alegría de saber que va quedando menos.

Nos leemos.

domingo, 7 de marzo de 2021

DE DOMINGO A DOMINGO... (XXVII)


 


PAISAJES

(Félix Grande)

Paisajes;

Pueblos, habitaciones, avenidas, aldeas,

parques, campos abiertos, tabernas, callecitas

tímidas, olorosas.

Plazas lejanas.

Ríos, carreteras, chozas grises

allá, sobre la pálida colina.

Ciudades

y distancias.

Salita breve en donde

una mujer sonríe

mientras hablamos, algo

que se hizo costumbre.

Escenas

A las que el tiempo convirtió en un cuadro

quieto, colgado ahora

allí, donde ocurrió, sobre sí mismo.

Muros que componían

Una calle. El silencio

que los paisajes nuestros

van oponiendo a nuestro olvido.

La ciudad

bajo su aspecto familiar,

cinco, seis, siete de la tarde;

repentina y fantástica bajo la madrugada.

Años sobre años. Tiempo

sobre tiempo. Paisajes

bajo la lluvia, bajo el sol, bajo la luna.

Fuentes del parque, en su lugar más viejo, más anciano,

como otro mundo.

Hojas del otoño por el suelo, hundidas

en el polvo dorado. Riveras

de los ríos, guardando

su medieval sonido eterno.

Mapa del corazón.

La numerosa geografía y el alma

rodando, ciegas, desvalidas. Años

sobre años.

 

Y nada

puede recuperarse, excepto en forma

de una gota de música.

 


jueves, 4 de marzo de 2021

AMIGOS




 


 

AMIGOS

 

Anqué quisiera,

ya no puedo escribir poemas

dedicados a los amigos.

Van quedando tan pocos

y es tan parca mi memoria,

que empiezo a dudar

si alguna vez tuve alguno.

Les falta magia a las palabras

y no puedo alumbrar oscuridades.

Noto que mi estrella se apaga

 y la voz se modula

con desbocados gritos de silencios.

 

Un amigo me queda,

 y no diré el nombre que él bien lo sabe.

Es el que doma y aplaca las tristezas,

el que necesito y encuentro,

el que hace coincidir la amistad y la risa.

El que siempre está allí

aunque a veces mi memoria,

lo cambia de paisajes.

Aunque la niebla se cebe

con las palabras y la mente,

quiero recordar aquel niño

que era capaz de volar,

mirando las estrella y la luna

desde un estrecho ventanuco.

 

Un amigo me queda,

y no diré el nombre que el bien lo sabe.

A pesar de la distancia,

nos pondremos de acuerdo

y brindaremos con ese vino,

que ahora es lo único que nos une de esa tierra,

donde aprendimos juntos,

la difícil lección de una vida responsable.

 

 

martes, 2 de marzo de 2021

VENGANZA


 


VENGANZA

 

(Microrrelato)

 

Se empeñó en escribir un microrrelato, con motivo del Día del Libro.

Lo intentó durante varios días y sus noches y no consiguió ninguno que mereciera la pena. O no tenían la concreción necesaria, o estaba llena de superfluos adjetivos, o necesitaba muchas más palabras para explicarse.

Lo que en verdad no sabía, es de la venganza de las cuartillas que usaba.

Venían del reciclaje de los libros, que un tiempo atrás, había tirado en el contenedor de papel y cartón.