martes, 27 de abril de 2021

LO QUE TE SALVA


 


Había cumplido tantos años, que ya apenas recordaba algunas cosas trascendentes de su vida.

Cuando ya había olvidado aquella tiranía larga que le tocó vivir cuando era joven, le viene ahora otra, más perversa e irreversible, contra la cual no se puede luchar y con una sola y tétrica salida.

Cuando lo amigos no llegan y una rugosa sensación de soledad te lleva al desencanto.

Cuando compruebas que a pesar de los años, sigues sin saber las cosas trascendentes de la vida y no estas capacitado para el consejo.

Cuando miras al futuro y todo el horizonte se tiñe de gris y nada.

Cuando en las tardes de lluvia las palabras se esconden en las arrugas de la memoria si escribes versos, movido por la sola urgencia de ser superviviente.

Cuando lamentas el tiempo perdido, los libros no leídos, los viajes que se quedaron en proyecto, los abrazos no dados, las guardadas palabras que podrían sanar y los besos que no llegaron a concretarse.

Cuando la indiferencia se adueña de aquello que siempre creíste importante.

 

Cuando todo esto y más pasa, solo queda y te salva, la repetida evocación del primer beso dado, a la mujer que siempre amaste.


21 comentarios:

  1. A ratos repasamos lo vivido, aquello que tanto disfrutamos, que creímos que era grande, que valían la pena nuestros desvelos. Cuantas cosas conseguimos, y puntualmente nos sentimos importantes. Con el tiempo mucho ha perdido brillo y lustre, lo que nos dió empuje otrora. A pesar de todo aun hay mucho por vivir. Abrazos

    ResponderEliminar
  2. Hoy te veo un poco nostálgico, pero nunca te faltan las bellas palabras que acompañan los sentimientos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Hoy te has levantado con el pie izquierdo; por suerte, el final, lo medio arreglas.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. La evocación del primer beso y de todos los besos,abrazos y muestras de afecto,es lo único que nos puede salvar de ese enemigo invisible contra el que no se puede luchar.
    Nunca pensábamos nadie que hubiera podido ocurrir tan gran descalabro humano.Pero así y todo,ánimo amigo Juan.Después de cualquier cielo u horizonte gris,después de cada tormenta,vuelve a salir el sol. Eso sí,nunca hay que dejar para otro momento nada.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  5. Un texto tan bello como nostálgico, por no decir triste y ante eso sólo me queda decirte que te pongas a hacer obra en tu casa, verás que pronto terminan esas sensaciones que ahora mismo tienes y miras al futuro con ganas y si no tienes ganas de obras, también se me ocurre que te vengas pacá a echarme una mano con la mía.
    Así es que "enga"... Cómo dice la canción "échame una mano primo..."

    ResponderEliminar
  6. ...Y desde ahí arrancamos con los buenos recuerdos que quieran asomarse a nuestro presente, un abrazo Juan!

    ResponderEliminar
  7. Boa tarde Juan. Fico feliz sempre que entro no seu Blogger, parabéns por suas palavras.

    ResponderEliminar
  8. Tristes palabras amigo, un día de bajada lo tenemos todos. Cosas por hacer, viajes aparcados, libros no leídos… y otras tantas, todos nos hemos dejado en el camino, pero eso no resta importancia a la felicidad vivida. Piensa en lo que te queda por hacer y en nuevas ilusiones sobre todo que no falten.
    Un abrazo tocayo.

    ResponderEliminar
  9. Melancólico , el recuerdo da luz a ese espacio en tu corazón.

    Besos.

    ResponderEliminar
  10. Leo por ahí que si estás nostálgico, que si te levantaste con el pie izquierdo...
    No, yo lo que veo es una persona que hace lo sensato. Aceptar que es mucho lo vivido y que es tiempo de introspección, recuerdo y balance. Que hay cosas que se quedaron como proyecto no fionalizado, a veces ni siquiera iniciado, pero otros dieron sus frutos.
    Querido amigo, deja el futuro para que lo trabajen los que tienen mucho y nosotros centrémonos en el presente y saquémosle todo el provecho posible.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. Yo coincido mucho con Noxeus, es más, lo suscribo. Pese a todo, se presentarán otras oportunidades más acorde con las circunstancias que tenemos, aunque presente, a veces, sinsabores y adversidades, la vida es un regalo, con picos bajos y otros mejores.

    Besos.

    ResponderEliminar
  12. Juan, en una vida hay muchas vidas. Todos somos supervivientes en el tiempo y esta pandemia nos ha enseñado a valorar la vida y las personas mucho más. Podría decirte que, nunca es tarde si la dicha es buena, amigo...La vida empieza cada día, aprovechémosla.
    Mi abrazo y mi ánimo, Juan.

    ResponderEliminar
  13. Bellas y melancólicas palabras que leo y siento en el alma. Saludos amigo Juan.

    ResponderEliminar
  14. Ese balance me parece triste, si bien es cierto que con los años, algunos amigos se alejan, y queda aún más lejano el recuerdo de aquel beso.

    Un abrazo y feliz día

    ResponderEliminar
  15. Belleza y melancolía a raudales.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Un texto real y profundo, que parece desdecir esa cierta “sequedad” que publico hoy. Me reafirmo en mi texto pero me alegra sobremanera el tuyo.

    Matizar, amigo, y comprendiendo tu parecer personal, que hoy no percibo esa “perversidad irreversible” y con la “sola salida”…

    Nací en el 48, tengo 72. E ignoro hasta el próximo mañana… ¡De él nada sé! Y si bien entiendo que hay situaciones personales delicadas, y muy delicadas, también veo que quienes me superan en años, viven sus vidas, la mayoría, con cierta naturalidad. Cierto es, como bien sabemos ambos, que en la vida hay de todo.

    A la no llegada de “amigos” también hago referencia hoy… Y tus palabras me indican que, tal vez, hay que salir en busca de otros! ¡Ancha es Castilla Juan!

    Lo trascendente de la vida, que pareces echar de menos su “saber”, ya el hecho de planteártelo hoy, es un paso. Algunos lo buscan con tiempo… Y a otros les es dado en su momento.

    Hay un Orden (libre de religiosidades o iglesias) y un “ordencito”. Éste último, el motor que con más o menos aciertos, dirige la vida de la mayoría. Quien se “suma” al primero…, generalmente cuando otros valores en la vida empiezan a “decaer”, permite que las cosas fluyan de otra manera…

    Es cierto que no hemos dado abrazos, no hemos pronunciado palabras o hemos limitado besos… Pero no veo tiempo perdido en ello. Esas ausencias nuestras, lo son/fueron, en consonancia con terceros. Y son esos terceros, por sí mismos, quienes tienen que procesar también esos hechos como suyos. Tal vez lecciones pendientes que trascender. Como las nuestras Juan.

    Lo que creímos importante, y hoy vemos que no lo era tanto, tiene poca relevancia, a mi modo de ver. Otros valores estarán ocupando su puesto. Aunque sean de menor número.

    Que tengas gratos recuerdos es importante para ti hoy. ¡Consérvalos!

    Abrazos.

    PD: Y gracias por permitirme, tus reflexiones, salir de mi propio momento...

    ResponderEliminar
  17. Me ha encantado tu texto, gracias por compartirlo!

    ResponderEliminar
  18. Creo amigo, que todos dejamos algo en el tintero, que si rebobinamos la película, hay escenas que quisiéramos borrar. Los años pasan factura, pero a ti te quedan tus versos, esos siempre irán contigo y serán como un regalo para muchos.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  19. ¡¡Que hermoso!!

    Cuanta verdad en tus versos. La vida pasa y nos quita las ganas de pasear, de leer, es decir que aquello que nos daba alegría ya no sucede y nos quedamos a solas con los recuerdos de lo amado.

    ResponderEliminar