Lo bueno de haber
cumplido los 80 es que ya no necesitas despertadores.
Los veo pasar todas
las mañanas, con sus pasos cansados de tantas laboriosas madrugadas, cuando
todavía el sol le saca los colores a tenues nubecillas que arreboladas, tratan
de esconderse tras el horizonte.
La pareja que cada día
se dirige al mar, cuando aún en la playa los tractores nivelan las arenas,
serán de mi quinta.
El marido trasporta
las sillas y la mujer un cesto de enea con las toallas.
Se colocan cerca del
lugar donde se confunden la espuma y la arena y como cada mañana, comulgan con
el mar y todos sus secretos.
Cuando sus ojos
empiezan a llenarse de estrellas por el parpadeo de las primeras irisaciones
del sol sobre las aguas, cogidos de la mano, entran en el agua, para recibir
juntos el agradable bautismo que les regala la naturaleza.
A la playa empiezan a
nacerles sombrillas, como flores multicolores, los niños preparan los enseres
para su fútil arquitectura y en las últimas líneas se montan bien juntitas, las
esterillas de los enamorados.
Cuando esto ocurre
ellos cogen sus bártulos y con paso pausado, pero felices, abandonan la playa.
Esta mañana, el sol ha
perdido la batalla antes las tercas nubes y un aire húmedo, ha prevenido a las
gaviotas que han desistido de sus majestuosos vuelos.
Ello no ha sido
inconveniente para que la pareja de mi historia, como cada día, con esa
puntualidad de los que ya lo tienen todo hecho, haya ocupado su sitio en
primera línea de playa.
Han seguido el ritual
de cada mañana, aunque esta vez, con una pequeña variante.
A la hora en la que
empiezan a llegar los veraneantes a la imperiosa llamada del mar, a la hora a
la que ellos suelen abandonar la playa, ha empezado a llover.
Desde mi terraza, he
visto como, mientras los demás huían en estampida de la playa para guarecerse
de la lluvia, ellos volvían a montar sus sillas, se cogían de la mano y
envueltos en gotas de lluvia, volvían a buscar las caricias de las olas.
Y así, mecidos por la
brisa y bendecidos por el agua total, se han abrazado mirando al horizonte.
Los he visto pasar,
camino de su casa, con su paso lento, pero con cara de felicidad.
Esa cara de felicidad
que solo se alcanza, cuando se está dispuesto a comulgar con la madre
naturaleza, o cuando la locura del amor verdadero, se olvida del tiempo y los
calendarios.
Una pena tener que llegar a esa edad para tomar una actitud tan positiva ante la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Nos dice Javier que es una pena que nos quede menos tiempo para disfrutar de esa mutua buena convivencia y de la Madre Naturaleza, pero discrepo cordialmente, porque haber experimentado esa calidad de vida no es poco, dado la edad que ya han cosechado...¡Ojalá llegue yo a esa edad!
ResponderEliminarEnhorabuena a ambos.
Un abrazete.
Empezamos a vivir muy tarde, cuando veo parejas mayores siento un respeto y cariño especial hacia ellas. Abrazos
ResponderEliminarEs una etapa bonita en que sólo existe la sinceridad en palabras y acciones que la corrobora la mirada.
ResponderEliminarUn bello texto para ilustrar una postal de amor que ha vencido al tiempo.
ResponderEliminarMe gusta eso de no tener que depender ya del despertador!
Un abrazo
Sí, un texto precioso, lleno de ternura... Me has emocionado, Juan... Me has recordado a mis padres que no iban a ver salir el sol sobre el mar, sino al revés: por su situación geográfica iban cada atardecer a verlo acostarse en él y ver o imaginar el rayo verde...
ResponderEliminarUn beso (ya he vuelto, después de ver amanecer sobre el mar también algunas mañanas ;)
Precioso, me ha conmovido tanta ternura, la felicidad de las pequeñas cosas. Un abrazo querido Juan
ResponderEliminarYo envidio a esas parejas que siguen siéndolo después de tanto tiempo. Quizás porque yo no fui capaz de conseguirlo. Mi silla mirando al mar es una silla solitaria. Pero existe :)
ResponderEliminarPRECIOSO, JUAN, un texto precioso hasta decir basta. LOVE FOR EVER YOUNG!!!
ResponderEliminarOtro abrazo de nuestra parte para vos y familia!!! (al ritmo al que visito la blogos, cada visita ya tenéis dos entradas, jajajajajaja...)