¡QUE
SE LAS LLEVAN!
Este articulo lo publiqué en el diario "Lanza de Ciudad Real, a principio de los años 70.
Ahora lo dedico a Inma (Molí de Canyer), nacida en la Mancha y amiga de sus tradiciones.
¡No hay derecho!. Como
manchego de pro, con ese orgullo que confiere el haber nacido en esta tierra y
ser defensor de todas nuestras señas de identidad, no tengo más remedio que
protestar. No sé ante quien, pero protesto y quisiera que a esta protesta se
unieran todos aquellos que empiezan a notar que algo entrañable y enraizado en
nuestra forma de ser, se nos va quitando en aras de no sé que extrañas
seguridades.
Todos me comprendéis, pero quizás más,
aquellos que ya han pasado la barrera de los 40.
Lo que nos tratan de
quitar en una aséptica nota de prensa, es algo que nos une con una agridulce
sensación a aquellos años de la posguerra. Como si nos prohibieran los goles de
Zarra, las canciones de Concha Piquer, o las faenas de Manolete.
En aras del progreso –
y yo no estoy contra él- hemos sustituido la bota por una nevera portátil, la
navaja por cubiertos de plástico de usar y tirar, la petaca y el papel Indio
Rosa, por unas cajetillas “made in USA”, que duran medio día, la cartera con
tres vueltas, freno y marcha atrás, por tarjetas de plástico que dicen que son
dinero.
Pero lo que ahora pretenden, no debemos
admitirlo. Por manchegos, agradecidos y porque tenemos memoria. Tenemos que
movernos y si es preciso formar una asociación- no política- para que unidos
todos, no sean capaces de movernos. ¡Y no nos moverán!.
Porque si a lo que
vengo refiriéndome, desaparece, no solo se tambalearan nuestros cimientos
éticos, sino que se vendrá abajo, como por ensalmo, toda una conciencia de cultura popular, gastronómica,
literaria, pictórica y lo que es más importante: de convivencia.
Habrá que ir pensando
en cerrar todas las cocinas de las bodegas, con las consecuencias que ello
tendría en deterioro de la amistad, del folklore, de la poesía, del abrazo.
¿Qué les parece a Uds.
manchegos, paisanos, amigos, lo que nos proponen?
Imaginaos que se
juntan cuatro amigos un sábado por la tarde y después de hacer su recorrido
habitual y cuando la noche empieza a ponerse “caliente”, uno dice:
.- Me he traído la llave. ¡vamos
a cenar a la bodega!
.- ¿Qué echamos?. ¡No es
hora de hatear!
.- No os preocupéis, yo
tengo “apaño”.
Y
el menú que os presenta es el siguiente: sanwhiches de jamón dulce y queso de
lonchas, croquetas congeladas, coca cola y como fondo discos de rock duro y
para la digestión una partida de backgammon. ¡Delicioso! ¿Verdad?
Porque,
manchegos, amigos, !!! Nos quieren quitar las Gachas !!!. Así como suena. Sin
pedir parecer, sin un refrendo popular, sin encomendarse ni a Dios ni al
diablo, pretenden borrar de un plumazo, algo heredado de nuestros ancestros.
¡Nos quieren quitar la historia!
Nadie
las prohibió en los años 40, cuando había que hacerlas con poco aceite, sin
“tropezones” y con una mano atrás porque el pan escaseaba.
Y
ahora que podemos tener pan “sentao” del día anterior, que las puedes acompañar
con “torreznos” y chorizos y que hasta
han pasado ser plato de lujo en importantes restaurantes, ahora nos las
prohíben.
Dicen
que es comida de animales. No es cierto. Al igual que el que escribe, muchos
coetáneos las han comido y hemos demostrado ser poco animales, o al menos
animales excesivamente amaestrados, porque,
mira que hemos aguantado cosas desde el 39 hasta aquí, sin un relincho,
sin una coz, sin una salida de tono.
El
capítulo 18 del Código Alimentario prohíbe “el
consumo humano de semilla de almortas y de los productos derivados de su
elaboración”.
Habrá
que preguntarse si este mismo Código es el del aceite de colza, el de los mejillones
infectados, el de la leche que nos dieron… con agua oxigenada, etc, etc. Lo
pregunto por tomárnoslo en serio o no.
Yo
quisiera que estas palabras mías, fueran como un aldabonazo en la conciencia de
mis paisanos y nos sirvieran para aunar esfuerzos en pos de mantener nuestras
tradiciones.
Ya
que somos capaces de casi todo, lanzo la idea de una “Asociación en Defensa de
las Gachas”. (ADELGAS).
Si
no, alguien, algún día, en cualquier plaza manchega, recordando heroicas
fechas, podrá gritar !!! QUE SE LA LLEVAN !!!. Y se puede organizar un dos de
mayo.
Evitemoslo.
Vuestras gachas no las he probado, pero las dulces con matalauva no me gustan
ResponderEliminarA pesar de ello me uno a tu proclama.
¿no lad wuitaron no?
Vuestras gachas no las he probado, pero las dulces con matalauva no me gustan
ResponderEliminarA pesar de ello me uno a tu proclama.
¿no lad wuitaron no?
Hay que rivindicar nuestras tradiciones , es la cultura de un pueblo y no tiene que desaparecer.
ResponderEliminarNo he probado las gachas pero son patrimonio del pueblo manchego.
Un abrazo
No se las llevarán. La cocina antigua vuelve a valorarse.
ResponderEliminarVuestras gachas manchegas las probé en una ocasión y estaban para chuparse los dedos, las que hacíamos por aquí, también han pasado al olvido, eran las dulces; según dicen hay otros productos más rápidos de cocinar y, con las prisas de hoy, los platos preparados tienen preferencia aunque también arrastran sus contraindicaciones.
ResponderEliminarSaludos
Yo soy medio manchego y apoyo la iniciativa :) Y, de paso y aprovechando la movida, propongo la creación de una Asociación en Defensa de los Gazpachos Manchegos (ADELGAM), esa delicia tan poco conocida allende las tierras manchegas. Queda dicho :)
ResponderEliminarMuchas gracias por tu dedicatoria amigo Juan, las gachas, oh! las gachas manchegas....y pensar que cuando era pequeña no las quería ni trovar ese paladar de niña que no sabe lo que es realmente bueno. La última vez que las comí, fue hace unos tres años en casa de mi hermana, las hacia mi cuñado pero ya no esta....Desde ese tiempo más o menos tengo una bolsa de harina de almortas guardada en mi nevera como si fuera un tesoro y es verdad que pone que es comida para animales, pero yo ni caso....lo que pasa es que no las he hecho nunca y no se como me saldrán. Como comprenderás te doy mi total apoyo para la creación de ADELGAS. Y si no tienes inconveniente voy a compartir tu escrito en mi muro de facebook, como digno homenaje a mi cuñado, que las hacia riquísimas.
ResponderEliminarUn bonito artículo publicado hace años y que lo trajiste aquí, hiciste bien, así podemos leerlo, y felicitaciones a MOLI por dedicárselo.
ResponderEliminarBesos a ambos.
Muy buen artículo, obviamente esta dirigido a cierto tipo de audiencia. Nosotros desde acá nos asombramos de las cosas que mencionas porque son muy de ustedes, y sería una lástima que desaparecieran matando nuestra esperanza de probar.
ResponderEliminarSaludos Juan.
Me apunto a esa asociación en defensa de la cocina tradicional, que no se olviden las recetas de la imaginación, cuando se hacía el guiso de patatas con carne sin carne y aún así sabía igual, o las patatas en alcauciles sin éstos. Hace unos meses, un grupo gastronómico al que he sido invitada, se reunió para celebrar el aniversario de la publicación del Quijote y nos deleitaron con platillos que se nombran en la obra. En los últimos años se están recuperando muchas de las antiguas recetas de mi zona.
ResponderEliminarYo me apunto a defender las gachas manchegas.
Un beso.
Yo me apunto a todo lo que supone defender las comidas tradicionales y sencillas pero confieso que esas gachas nunca la he probado. Tendré que remediarlo. ;)
ResponderEliminarBravo por la iniciativa, Juan. :))
Besos
Aunque soy de otro continente y nunca he probado , ni siquiera escuchado sobre las gachas, me solidarizo con tu propuesta porque no se porque motivo, las comidas de antaño las quieren eliminar "y que" por ser perjudiciales...cuando la verdad son todas las comidas modernas llenas de aditivos las que han enfermado a esta sociedad...
ResponderEliminarMe ha gustado saber mas sobre este plato y sobre la tradicion de no comer gachas cuando alguien ha muerto, porque se cree que ese día el muerto mete el dedo en el puchero...cosas de pueblo...besoss