El
mar en la noche
se
olvida de las horas
mientras,
desde
la triste oscuridad de un faro
se
lanzan mensajes de luces
que
consiguen avergonzar a las tinieblas.
La
luna, provocadora,
se
dedica a pintar estelas,
sin
escuchar el ritmo de las olas,
ni
los guiños que lanzan las estrellas.
Mi
barca,
vestida
de lona y pena,
sigue
el rastro de esa espuma
que
va quedando de los sueños que mueren,
buscando
su isla de Utopía.
Un
naufragio de azules,
es
el último reclamo que le queda a la aurora,
para
que con un baile de gaviotas,
anuncie madrugadas.
Hermosísimo poema, Juan, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarQué preciosidad de poema. Y la pintura, me encanta. Los faros tienen una simbología especial con esa luz que como tú tan bien dices, avergüenza a las tinieblas. Besos amigo mio :D
ResponderEliminarLa noche, frente al mar, con luna llena y una caña dispuesta en la orilla a que algo o nada pique, esa imagen la disfruté una noche de Covi.
ResponderEliminarEl mar y su hipnótica magia! Bellamente contado en versos gráciles y emocionantes. Un gusto leerte, Juan!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQué delicadeza y profunda verdad encierran tus versos!!!
ResponderEliminarY cómo me gusta esa pintura...es perfecta para mis obras de patchwork.
Un abrazo fuerte Juan.
Lo has hecho tan sentido y cierto, que me voy salpicado por las olas.
ResponderEliminarUn abrazo.
La de veces que he venido tiempo atrás, y nada, no podía dejarte comentario. Y ahora al entrar y ver que ya se puede me he alegrado para poder dejarte mis huellas, pero no he dejado de leerte, tu blog es de los que no dejo de leer desde que te descubrí hace años porque es puro arte y sensibilidad lo que transmites.
ResponderEliminarEspero que te encuentres bien, y me alegra que no hayas dejado de escribir.
Me encanta el dibujo y el poema, entre las olas de tu mar navego.
Un abrazo enorme.
Derrochas sensibilidad en la pintura y en los versos. Los faros tienen algo especial, que me atraen o quizás sea sólo la envidia que les tengo de que siempre están mirando al mar.
ResponderEliminarUn placer leerte siempre.
Un abrazo, marinero
Un poema sutil y bello. Mar y faro, noche y luna, en una amalgama preciosa.
ResponderEliminarUn abrazo, Juan
Great blog
ResponderEliminarUn barco, un faro, una luna. Hay tanta poesía en tu cuadro como en tu poema. Y quizás también añoranza de tu tierra manchega, aunque allí los barcos son cortijos, el mar son campos de cereales y la luna... la luna :)
ResponderEliminarUn abrazo, Enrique.
Son tan bellos el faro, el barco y la mar, con sus olas y diseños, que tu poema, verso a verso pinta la belleza de la noche y la llegada de la madrigada. ¡Muy completo y mucha sensibilidad! Un lujo, contemplar y sentir lo que trasmites.
ResponderEliminarUn abrazo, Juan L.