La amiga Mónica de Neogeminis, nos invita este jueves a que
escribamos la génesis de un personaje real o imaginario.
He escrito este poema pensando en mi. En aquello que era , lo
que pude haber sido y lo que soy ahora.
He cerrado el circulo y me temo que ya está todo dicho y el
personaje dará para poco más.
No soy ya,
el que ponía collares de risa a las mañanas tristes.
Ni el que intentaba descifrar los problemas del mundo
hurgándose, pensativo, la nariz.
Ya no soy el que creaba canciones,
en la esquina somnolienta de la clase,
absorto en los rizos de aquella chica,
que, por supuesto, nunca fue mía.
No soy el que inventaba aventuras
tomando billete en un libro de mapas.
Ni el que surcaba charcos en barcos de papel
en largas y fangosas singladuras.
No soy el que guardaba en su bolsillo
un planetario de canicas, como mundos brillantes.
Ni soy el que robaba el nervio a las lagartijas,
junto a las tapias calurosas de la siesta.
Ni el que se hizo perito en hojas de morera,
conocedor de trinos,
cazador de mariposas,
salteador de huertas,
catador de frutos.
Ya no soy,
aquel proyecto de hombre,
delimitado de consignas azules
que pretendieron hacer sin conseguirlo.
Ahora soy:
minero de achaques
detector de reumas y jaquecas,
conocedor de toses y latidos.
Sigo jugando a la aventura,
solo que ahora viajo por los ondas,
anclado a una pantalla y una silla.
Desde aquél que quería robarle el sitio a las cigüeñas
a este Juan de hoy, anquilosado,
muchas cosas han pasado por la vida.
Para no parecer insatisfecho,
os diré un sincero ¡me conformo!,
que ganaron las sonrisas a las penas
y me quedan unos ahorros de esperanza.
A pesar de haber gastado,
me siguen quedando abrazos
y guardo los besos necesarios.
No quiero abusar, por eso solo pido,
seguir inventándome canciones,
en esta esquina luminosa de la clase,
mientras la vida sonríe en la ventana.
Minero de achaques jugando a la aventura... Inventando canciones...
ResponderEliminarPero qué original tu personaje, me ha encantado tu inspiración para este jueves.
Un beso.
No es ningún abuso, sino todo lo contrario: uno es la consecuencia del otro y nada tendría sentido ni hubiese sido posible sin aquel primero y vale recordarlo. Muchas gracias por sumarte, Juan. Ya te agrego con tu enlace. Un abrazo
ResponderEliminarConcido con Neogéminis: sin todos los que fuiste no serías el que eres. Y prueba de ello que sigues "inventando canciones en esta esquina luminosa de la clase, mientras la vida sonríe en la ventana" ;) ¿Me puedo sentar a tu lado? ;)
ResponderEliminarAbrazo, Juan poeta.
Lo que fuiste no lo sé, pero sé lo que eres un MAGISTRAL POETA, y aún te queda muchísimo por enseñar, así es que no te escudes en tus achaques y brinda con un Valdepeñas por la vida, que cuantos hay que ya no lo pueden hacer,
ResponderEliminarPErdona si me he puesto firme, pero me duele verte pesimista.
Un fuerte abrazo.
Puede que no seas el que eras , pero ahora eres alguien que transmite mucho en sus letras.
ResponderEliminarBesos
yo junto palabras, tú haces calidoscopios con ellas. Gracias por tu comentario, y no llevo, pero me quitaría el sombrero por lo que escribes
ResponderEliminar¡Pero que belleza! ¿sabes? la he leído en voz alta porque "el personaje" merece ser declamado y aclamado.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Pero qué bárbaro, Alfredo! Has descrito el personaje con detalles asombrosos, que agilidad en tus palabras. Estoy de acuerdo con Rosa en su comentario. Una oda a los años , a la vida.
ResponderEliminarAbrazo
En verdad ese Alfredo me descoloca un poco. Me imagino que será un lapsus debido a la lectura de tantas entradas.
EliminarDe cualquier manera, gracias.
¡Pero qué bárbaro, Alfredo! Has descrito el personaje con detalles asombrosos, que agilidad en tus palabras. Estoy de acuerdo con Rosa en su comentario. Una oda a los años , a la vida.
ResponderEliminarAbrazo
Ahora es experiencia de vida.
ResponderEliminarUn abrazo y un beso.
Qué maravilla Juan! Es uno de los poemas que más me ha gustado de los que has escrito. Me encanta cómo has hecho esa transición entre lo que fuiste y lo que eres...Qué remedio, el tiempo pasa igual para todos. Tiene melancolía tu poema pero también tiene conformismo con lo que te ha tocado vivir porque como tu dices "ganaron las sonrisas a las penas".
ResponderEliminarUn beso
Y todo eso que fuiste es lo que te ha convertido en ese ser mágico que hoy sos. Ese escritor que nos envuelve en sus letras, en las que se puede sentir cada palabra, cada verso, como propios.
ResponderEliminarLa vida cambia todo el tiempo, hay que aprender a aceptarla como viene y sacar lo mejor de ella.
Un abrazo enorme.
Me encandilas, me hechizas con las palabras. Ya no eres aquel, ahora eres este otro ser maravilloso y sabio, y es gracias a aquel cantor y aventurero como has llegado a éste. Siempre estará dentro de ti, como una bola de cera a la que vamos añadiendo más y más chorreones y ésta se va haciendo cada vez más grande pero en su núcleo estará siempre el principio y cada minuto vivido.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me encandilas, me hechizas con las palabras. Ya no eres aquel, ahora eres este otro ser maravilloso y sabio, y es gracias a aquel cantor y aventurero como has llegado a éste. Siempre estará dentro de ti, como una bola de cera a la que vamos añadiendo más y más chorreones y ésta se va haciendo cada vez más grande pero en su núcleo estará siempre el principio y cada minuto vivido.
ResponderEliminarUn abrazo.