Dicen que hay música también en el silencio.
En esa extraña soledad,
con la que la mente, a veces, se obsesiona.
En el pentagrama de ese triste concierto,
las notas no gritan vibraciones,
mejor se anulan y enmudecen
en un triste pozo de desgarro.
El metal y la cuerda se suicidan
y solo la percusión duele hacia adentro,
con sonidos roncos y precisos.
Son los latidos,
que añoran su cadencia,
esperando que la frescura de la música,
nos vuelva a la esperanza
de una sonora claridad de primaveras.
Preciosos. ¿Cómo suena el silencio? ¿qué nos dice el silencio en una conversación?, ese silencio que sólo la percusión sabe romper, porque recuerda siempre a los latidos.
ResponderEliminarMaravilloso, onírico y de un ritmo musical. Un abrazo
Hoy has hecho un hermoso concierto con las letras de tus latidos, una música que se escucha con la mirada, que se bebe con las pupilas, que se sienten con frescura y me ha maravillado tu poema, mi querido amigo.
ResponderEliminarUn placer disfrutar de tus letras.
Un beso enorme.
La esperanza espera ahí, quieta y en silencio, el momento en que la música resuene de nuevo y llene el aire con sus notas. Un precioso poema.
ResponderEliminarun abrazo.
Quien no haya escuchado la música del silencio, no sabe lo que se pierde.
ResponderEliminarUn abrazo.
No hables al menos que puedas mejorar el silencio.
ResponderEliminar(Jorge Luis Borges )
Se escucha la música del silencio en tu magistral poema.
ResponderEliminarBesos
A veces con leer tus versos ya oigo tus arpegios. Suenan en silencio porque los leo en voz queda. Un abrazo maestro
ResponderEliminarEso que tú has dicho tan poéticamente yo lo digo bastante más prosaico "el silencio también es música"
ResponderEliminarY como yo no puedo mejorar el silencio, me callo, como decía Borges, en cambio tú que lo puedes mejorar, sigue escribiendo siempre, por favor.
El sonido del silencio, a veces necesario, a veces doloroso
ResponderEliminarHermoso poema, Juan, como todo lo que sale de tu corazón.
Un beso
Sí, puede que hay música en el silencio... O por lo menos nos acompañe esa melodía de sosiego y serenidad.
ResponderEliminarAbrazo Juan.
...haya...
ResponderEliminarYa lo decían Simn y Garfunkel :-)
ResponderEliminarAún en el silencio, gracias por tu visita.
ResponderEliminarA mi me gusta el sonido del silencio.
Feliz viernes Joaquín
Saludos
Algo fundamental en el pentagrama son los silencios. En el silencio también hay música, algunas notas se escapan de la escala. Son los errores que cometemos que a veces llegan a interrumpir la armonía y otras, son capaces de cambiar este pentagrama y elegir un nuevo destino y crear una nueva escala.
ResponderEliminarY así hasta que llegue el final siempre genial y esperado. Llegará el momento en que culmine todo, llegará el silencio, el tan apreciado silencio que dará la última nota final.
Hermosas palabras.
El silencio o música de los latidos, que nos pone en contacto con nuestra soledad y fragilidad humana...Ese silencio que a veces nos prueba o nos abraza, en sincronía con la armonía de las esferas...Mi felicitación por tus letras-notas, que nos elevan al sentir la belleza del poema.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz fin de semana, Juan.
Qué bien que está escrito, Juan, siempre es un agrado leerte. Tus palabras son puentes hacia desgarros oscuros y alivios de luz, siempre veo ese movimiento tan íntegro. Bello poema, un abrazo!
ResponderEliminarÉste es un poema que yo pondría en una antología de grandes poesías de la lengua.
ResponderEliminarMaravilloso.
Un abrazo
Divino!!!
ResponderEliminarMe encanta comoe scribes, toca el alma.
Muchos besos, Juan.