Escucho tu voz
y vuelvo a los tiempos aquellos
en que la juventud era
como el murmullo del agua en la ribera.
Escucho tu voz
y me nace de nuevo la sonrisa,
con la música certera
de un aleteo de pájaros,
en las ramas transidas de mi pecho.
Escucho tu voz
y las plumas de los ángeles,
(en caso de que existan),
me acarician las entrañas,
como mariposas ciegas
que no saben de oraciones.
Escucho tu voz,
dejan de importarme los silencios
y vuelvo a la palabra,
con su largo compromiso
de libertad y rebeldía.
… tu voz,
esa luz abierta a todas las certezas
y a la armonía cierta
de un sueño que se hizo realizable.
Hay voces que permanecen como faros perennes a lo largo de nuestra existencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
A veces incluso "intuyéndola". :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Esa voz que te ha acompañado, que resurge, con la misma fuerza que antaño, acaeciendo al alma, nuevamente
ResponderEliminarUn abrazo y por las voce que acunan, sin dejar pasar al desengaño
Un voz inolvidable... bellos versos.
ResponderEliminarBesosss
Qué bien escribes poesía, qué envidia que tus palabras fluyan con una claridad y gusto exquisitos.
ResponderEliminarHay voces que jamás quisiera que se apaguen.
Abrazos.
Escuchar una voz latente en tu corazón y mente es algo que la retina siempre retiene en la memoria, precioso pasear por tus letras.
ResponderEliminarUn inmenso abrazo!!
Una voz sentida que te da vida, una voz que resuena y te alimenta. Preciosa inspiración Juan, siempre es un placer leerte. Abrazos
ResponderEliminarMuy bonito poema, pero qué difícil, para mí al menos, escuchar la voz querida de alguien que ya no está.
ResponderEliminarBesos de corazón.
Voz inolvidable que al recordar da vida y que en estos versos esta presente. Saludos amigo.
ResponderEliminarQue bonito Juan. Buen fin de semana
ResponderEliminarGracias por los versos que me dejaste.....son preciosos....Saludos amigo.
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